El lugar de trabajo elegido fue el límite de la ciudad amurallada, en relación con el río Arno y al puerta amurallada de San Frediano.

El sistema constructivo utilizado para la pronta y económica realización del proyecto son los contenedores portuarios.

Se diseñan dos diferentes módulos, uno de ellos se divide en dos, dando servicio a dos diferentes viviendas, que contiene la zona de servicio y los otros módulos contienen las habitaciones. Con la multiplicación del módulo habitación y jugando con el módulo servicios, se consiguen diferentes tipologías, viviendas-estudio, de una, dos o tres habitaciones.

Le Corbusier hablaba de recuperar el suelo con la cubierta ajardinada, nosotros le damos una vuelta y recuperamos el suelo ocupado con el muro verde que envuelve el edificio. Este muro unifica los diferentes volúmenes de viviendas, además de ser el núcleo de circulación entre ellos.